lunes, 7 de junio de 2010

Histeria Colectiva

Hoy en día, es común ser afectado por el mal del siglo: el Estress.
Claro pese a ser varios los factores que nos llevan a tener esta respuesta de defensa natural del cuerpo que la hemos llevado al extremo poder matarnos. Vamos a enfocarnos solo en uno de los factores: el conducir el vehículo.

En Quito hay algo que el pico y placa no va a quitar; estamos hablando de los conductores histéricos. Actualmente mucha gente al salir con sus vehículos no solo se fija si tiene su tanque lleno de conbustible, sino también su boca llena de improperios. Los que no cuentan con ese fluido vocabulario, utilizan otro medio, el pito. Donde yo vivo, los parqueaderos son abiertos debajo de cada bloque de departamentos, y es impresionante el uso que le dan al pito: saludan, llaman personas, reclaman y solo hay que ser creativo en su uso. Nunca piensan en que hay gente cerca que se ve afectada por la contaminación de ruido.

No importa lo que seas (doctor, abogada, obrero, oficinista, etc.), al rato que tomas el volante la trasformación ocurre: tus pupilas se agrandan, la adrenalina corre por todo el cuerpo, tu rostro se torna rígido y cambias tu humanidad por el animal que llevas dentro. Incluso hay algunos que se ponen verdes, siento un doble perfecto de Hulk.

Creo que actualmente la licencia de conducir se ha convertido en una licencia para discutir con otros en la calle: peatones, otros conductores o quien o lo que se cruce.

Claro amigos míos, que no son todos, y estoy seguro que los buenos somos más. Que aún hay damas y caballeros al volante, que tienen claro que el vehículo ha sido creado para facilitarnos la vida y no para acabar con ella.

JoPhY

1 comentario:

  1. NO SE LLAMAN HISTÉRICOS, SON GENTE INCULTA.

    Quizá debería publicar mi propio blog de la diferencia que hay entre el país en que que vivo actualmente y mi país.
    Hay gente que se piensa que son los únicos que han llegado a los países que han emigrado, personas que no deberían de haber salido nunca, gente que van en coches de alta gama, pero borrachos, que tienen televisores plasma de cincuentamil pulgadas y fardan de ellos, pero con deudas millonarias, que se piensan que la comida típica tiene que venderse clandestinamente en lugares que frecuentan los paisanos y todo acompañado de una cerveza....
    Hay costumbres que cuando llegas a un país que es 20 veces más desarrollado que el tuyo deberías de cambiarlas y adaptarte a ello, y una de ellas es la de conducir moderadamente y como te enseñan en las aquí llamadas AUTOESCUELAS, con sus debidas normas y cumpliendo lo que aquí casi siempre respetan que es la ley; pero me parece de manera muy desagradable que en un país como el nuestro, que siempre estamos tratando de imitar las costumbres y las formas de hacer las cosas de otros países que siempre aprendamos lo malo, me pregunto porqué siempre ponemos la crisis en medio de todos nuestros problemas y nos aprovechamos de la palabra pobreza para ocultar lo que sabemos que está mal pero lo seguimos haciendo, la crisis y la pobreza siempre ha existido, y más en nuestro país, pero éso si,vivimos del turismo!pero no ponemos el menor empeño de dar una buena imagen, porque qué mas dá nosotros somos así; me indigna de sobremanera que he vuelto después de 6 años y el país se haya puesto hermoso de cara pero siga siendo el mismo de siempre en su corazón, me entristece que no sólo en la forma de conducir la gente sea una imprudente y una inculta en todas las cosas que hacen, siempre tratando de poner cara de pena, cuando los problemas siempre han estado ahí, que nos quejemos de todo lo mal que nos va en la vida y que la culpa siempre sea de otro y no hagamos nada, nosotros mismo por cambiarlo, por arreglar la situación, por salir con una sonrisa adelante, pero no!, siempre, siempre vamos a seguir siendo el país tercermundista del que los extranjeros describen a la gente como "muy amable" pero siempre está el borracho, el sobornador, el oportunista, y para colmo: el ladrón!
    Me parece que si vuelvo dentro de seis años, iré con la historia de que la cosa está mejorando pero nosotros seguimos igual: Incultos.
    Vivi.O.

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